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Ficha

Resumen

Verano en la costa de Maine. Matt Fowler (Tom Wilkinson) es médico y ejerce el oficio en su ciudad natal. Está casado con la neoyorquina Ruth Fowler (Sissy Spacek), profesora de música. Su único hijo, Frank (Nick Stahl), se encuentra pasando el verano con ellos y trabaja medio tiempo como pescador de langostas para ganar dinero y pagarse su estudios. Sostiene un romance con Natalie (Marisa Tomei), una joven madre divorciada de Richard (William Mapother), un hombre violento que no tolera la nueva relación de su ex esposa. A medida que el hermoso verano en Maine va llegando a su fin, estos personajes se verán envueltos en una tragedia que cambiará sus vidas para siempre.

Comentario de Cartelera.com.uy

La delgada línea entre lo bueno y lo malo

Personalmente, la experiencia de ver In the bedroom me dejó con sensaciones encontradas. A diferencia de otras películas, que te producen una opinión inmediata (favorable o no), ésta me dejó como parado ante una bifurcación, sin animarme a decidir qué camino tomar. Y también a diferencia de varios espectadores que la vieron conmigo, quienes protestaron apenas empezaron los créditos.
En este caso, leer los comentarios de otros espectadores me ayudó a ordenar un poco mis propias ideas. A veces no hay como escuchar a los demás para saber exactamente lo que uno quiere decir...

Coincido casi plenamente con Danilo S (24), de cuyo comentario extraigo un párrafo que me parece crucial: "Si lo que el espectador está buscando es gratificación instantánea y definiciones fáciles, se va a sentir bastante decepcionado. Pero para aquellos que se sientan en la sala no a esperar lo que la película les pueda dar sino lo que de ésta puedan comprender, les aseguro que no se van a arrepentir".

Me parece que arrepentidos siempre puede haber, Danilo, aunque yo ya hace tiempo que dejé de tratar de adivinar lo que el espectador está buscando cuando va al cine. Fundamentalmente porque no existe "el espectador", sino muchos espectadores (si bien se sabe que "el público" es una masa más bien uniforme que en general responde al marketing, como lo puede demostrar el hecho de que la película más vista en Montevideo esta semana sea Una Mente Brillante, coincidentemente ganadora del Oscar).
Pero de tu comentario rescato sobre todo una definición del film: decís que éste es "a veces incómodo". Esto me parece clave; si es que podemos hablar de "el espectador", o "el público", como entidad referente, me atrevo a decir que siempre es peligroso ponerlo "incómodo". Está demostrado que cuando una película desafía a su público con más preguntas que respuestas, o con más enigmas que resoluciones, se arriesga a ser inmediatamente calificada de "mala". Y ese es, creo, el caso de In the bedroom.

Es una película en la que los personajes suelen comportarse de manera inesperada, o, al menos, no de la forma en que el espectador actuaría. Como si los personajes en el cine fueran reflejo de un comportamiento estándar; como si uno fuera al cine esperando verse en un espejo, reacio a las sorpresas, impermeable a otras actitudes que no reconocemos como propias (como si realmente pudieramos saber cómo actuaríamos en cada circunstancia de la vida).
No creo que la película sea perfecta, ni siquiera puedo asegurar que me gustó; lo que sí puedo decir es que ninguna película que me provoque emociones o me estimule la capacidad de reflexión puede ser catalogada de mala. Y ciertamente, In the bedroom es lo suficientemente inquietante como para penetrar en su propuesta, aún a riesgo de luego ser insultado por la recomendación.

Nadia (18), por ejemplo, opinó que "el argumento es pobrísimo". ¿Realmente te parece pobre una historia que lidia con temas como la muerte de un hijo, el dolor por la pérdida, la necesidad de venganza? Eduardo (41) dice que "es una película con un buen guión pero mal llevada a la dirección"; no estoy de acuerdo, me parece que la dirección del debutante Todd Field (que es también actor) es muy firme, muy creativa aún dentro de su simpleza y su linealidad, y sobre todo muy acorde con su historia. Digamos que a cierta altura el asunto se estira un poco y se vuelve algo pesado, pero no creo que ese tramo baste para afirmar que Todd Field es un mal director.
Y, sobre todo, no estoy de acuerdo con Eduardo en que "tiene un final americano". En realidad no estoy muy seguro de qué es un final americano, aunque creo entender que Eduardo se refiere más a la conducta del padre que a la resolución de la historia, la cual es tan americana como Bergman. Es un final poblado de enigmas, hundido en el silencio, donde queda claro que ningún gesto de revancha ha podido ni podrá aplacar el dolor... Sí, tenés razón Eduardo: fue filmado en algún lugar de América. Definitivamente es un final americano.

Por Enrique Buchichio para Cartelera.com.uy