El desinformante

El desinformante

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Presentado por
  • Titulo original: The informant!
  • Dirección: Steven Soderbergh
  • Género: Comedia
  • Protagonistas: Matt Damon - Scott Bakula
  • País: Estados Unidos Año: 2009
  • Duracion: 1h48'
  • Elenco: Joel McHale - Melanie Lynskey - Lucas Carroll
  • Sitio oficial IMBD
  • Disponible en: DVD
  • Tipo: Película
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Ficha

Resumen

Mark Whiteacre (Matt Damon) es un bioquímico que trabaja para una compañía alimenticia bajo sospecha y que se convierte en informante para el FBI. Poco a poco, Whiteacre se convence de que es un verdadero agente secreto. Mientras sus mentiras se acumulan, su mundo alrededor comienza a desmoronarse. Basada en una increíble historia real, narrada por el periodista del New York Times Kurt Eichenwald.

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Comentario de Cartelera.com.uy

En pocas palabras…: El increíble personaje protagónico y su absurda historia real tenían potencial para una estupenda parodia, pero como comedia se queda corta. En manos de los hermanos Coen, por ejemplo, hubiera sido infinitamente más divertida.

Agente 0014

Tanto el título original como el castellano, y sobre todo la caracterización de Matt Damon como el personaje central, permiten reconocer que estamos ante una suerte de parodia de El Informante (The insider), aquella estupenda película sobre corrupción corporativa estrenada por Michael Mann hace exactamente diez años. Al igual que Russell Crowe en aquella caracterización de Jeffrey Wigand, aquí Damon también engordó varios quilos, se aclaró el pelo y se puso lentes (además de bigote) para encarnar a Mark Whiteacre, otro científico que, al igual que Wigand, se hizo famoso por revelar datos sobre las prácticas corruptas o abusivas de la compañía para la cual trabajaba.

Y aunque ambos casos fueron reales, la diferencia sustancial es que Wigand fue una especie de héroe, que llegó a poner en riesgo su vida y la integridad de su familia por denunciar en una entrevista televisiva la negligencia de la compañía tabacalera que lo había despedido. En cambio Whiteacre… bueno, hay que verlo. Basta con decir que si no fuera un caso verídico (contado en un libro de no-ficción por el periodista del New York Times Kurt Eichenwald) uno diría que no puede ser verdad, que un personaje como Whiteacre sólo puede ser producto de la imaginación de un guionista. Pero, una vez más, la realidad supera a la ficción con creces…

El director se toma el asunto en broma desde el comienzo, recurriendo a una tipografía de títulos y a una banda sonora (gentileza de Marvin Hamlisch) que remite a aquellas comedias más bien absurdas de los ‘60s, y por qué no a las primeras entregas cinematográficas de la serie de James Bond (para alguna de las cuales Hamlisch supo componer algún tema emblemático, como “Nobody does it better”). Es más: si en un raro ejercicio de nostalgia hubiera que imaginar a un actor de aquella época encarnando a alguien como Whiteacre, ese actor sería sin ninguna duda Peter Sellers. Nadie como él podía encarnar con tanta seriedad a un hombre cometiendo semejantes estupideces. Dejando la inútil comparación de lado, Damon sale bastante bien parado.

Lamentablemente no puede decirse lo mismo del director Steven Soderbergh, quien ya había incursionado en la mala praxis corporativa (pero en serio) con el efectivo drama Erin Brockovich (2000). Es evidente que Soderbergh quiso hacer una comedia, sin embargo El Desinformante no es todo lo divertida que podría haber sido. Para ser honestos no es ni siquiera divertida. Hay, sí, algunos momentos irrisorios, como esos en que Whiteacre juega su papel de (falso) agente secreto (a cierta altura dice que en el FBI lo identifican con el código 0014, por ser “dos veces más astuto que James Bond”…). Pero por lo general es una película que se mira con apenas una sonrisa y algún gesto de incredulidad en el rostro, como reconociendo que aquí hay material para una estupenda parodia pero que el verdadero sentido del humor faltó a la cita.

Creo que en manos de unos cineastas como los hermanos Coen, por ejemplo, el resultado sería infinitamente más divertido.


Por Enrique Buchichio para Cartelera.com.uy

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