Cartelera

Ficha

Resumen

El 15 de abril de 2016, la ciudad de Dolores fue atravesada transversalmente por un tornado con vientos de 330 km/h, causando al menos 5 víctimas mortales, innumerables heridos, más de 9000 damnificados y millones de dólares en pérdidas materiales. Cinco años después, 12 sobrevivientes de la catástrofe intentan sanar una herida que subsiste caprichosa, entre tanto escombro y tanta historia perdida.

Trailer

Comentario de Cartelera.com.uy

El viento en la cara

El 15 de abril de 2016 un tornado implacable azotó durante algo menos de quince minutos la ciudad de Dolores. Como casi siempre pasa, el énfasis de la información estaba en las víctimas mortales, en las pérdidas económicas y en los desastres edilicios generados. También se hacía referencia a cómo este tipo de sucesos despiertan lo mejor y lo peor de la sociedad. La solidaridad de miles de personas, organismos oficiales y gremios - en este sentido lo del Sunca fue especialmente valioso - tuvo su contracara en esas alimañas que, aprovechando el caos imperante, robaron y saquearon lo que encontraban a su paso. Con el correr de los días llegaban las noticias de cómo la ciudad se iba reconstruyendo, y poco a poco, para los que no vivimos directamente las consecuencias, los ecos se fueron apagando.

Pablo Martínez Pessi, doloreño y director de este documental, ya había puesto la vara muy alta en sus dos anteriores trabajos. Desde las aguas (2009) y especialmente Tus padres volverán (2015) presentaban a un cineasta que, además de manejar un más que atrayente ritmo narrativo, lograba en sus entrevistas salir de lo obvio y llegar a estados profundamente humanos y de una manifiesta sensibilidad. Todo esto se confirma y potencia en este nuevo trabajo que, justamente, tiene su esencia en cómo aquel fenómeno influyó e influye en la vida de quienes lo vivieron en carne propia.

Son 12 entrevistas, 12 personas frente a la cámara. Al principio nos cuentan de cómo y dónde los sorprendió el tornado para, poco a poco en algunos casos o como descarga necesaria y urgente en otros, compartir emociones que traslucen las marcas y los cambios que aquel cuarto de hora deparó en sus vidas.

Todos los relatos tienen un marcado interés. Solo como ejemplo referiré a la mujer embarazada a quien por un tiempo le aconsejaban no llorar; al obrero que en pleno desastre salió en busca de su hija pero que en el camino no dudó en rescatar a un padre que llevaba a su hijo al hospital; o ese veterano de mirada clara y melancólica que salvó la vida de su madre de 96 años, pero que ni semejante proeza evitó que no sienta culpa por no haber sido aún más solidario.

La forma en que Martínez Pessi registra rostros, silencios y emociones conmueve y pone al espectador en la piel de quienes se desnudan emocionalmente frente a la cámara. Vale recalcar que todo esto se logra sin golpes bajos, y con un profundo respeto ante el entrevistado. Las fotografías en blanco y negro entre cada entrevista, y los cuatro minutos de videos que todos vimos hace 5 años, están sabiamente intercalados en el relato, en virtud de la apropiada edición del propio director y a la fotografía de Andrés Boero.

Estamos ante un trabajo mayor en forma y en concepto; en especial, por poner en el centro a seres humanos que afrontaron una situación límite que originó marcas difíciles de superar, pero que también, y como valiosa contrapartida, fue comienzo, resiliencia y superación.

Por Pablo Delucis para Cartelera.com.uy